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Seroma tardío: ¿Qué es y qué síntomas tiene?

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Se denomina seroma tardío al acúmulo de líquido seroso, sin la necesidad de estar rodeado por tejido conectivo que lo contenga.

Suele ser secundario a una cirugía, localizándose en el área donde se ha eliminado tejido, por la aparición de un espacio donde se pueden fugar las presiones de los líquidos intersticiales, favorecidos por la inflamación, dando lugar a su acumulación. Cuando el seroma aparece más allá de los tres meses se denomina seroma tardío. No suele contenerse por tejido conectivo, ya que si este existiera nos encontraríamos con un seroma encapsulado, que se debe eliminar quirúrgicamente.

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En la mayoría de los casos, los seromas tardío son secundarios a una cirugía, en la que por lesión de los linfáticos o por respuesta del tejido ante una dehiscencia, por microtraumatismos, por ser áreas móviles y sometida a tracción, es fácil que terminen por reaccionar los tejidos de sostén con la producción de un trasudado que puede concentrarse cerca de las cicatrices quirúrgicas (más allá del tiempo habitual en el que suelen aparecer los seromas).

¿Son comunes los seromas?

En la actualidad si aparece un seroma este suele ser pequeño gracias a los protocolos quirúrgicos. Esta minimización en su aparición, es debida al empleo de drenajes y vendajes compresivos, cuya función es evitar el acúmulo de líquidos.

Si aparecen los seromas lo harán sobre la segunda y tercera semana por la eliminación de los drenajes, pero suelen ser de pequeña entidad y el organismo termina por resolverlo. La especialidad quirúrgica que más se enfrenta a los seromas es la cirugía plástica ya que ciertas técnicas y regiones corporales dificultan un correcto drenaje.

Los liftings, cirugía mamaria, abdominoplastias… son áreas en las que se comprometen los sistemas de drenaje alterando el circuito de la linfa, dificultando la función del sistema linfático.

¿Cuáles son sus síntomas?

Los síntomas del seroma ya sea temprano como tardío, son los secundarios al acúmulo de líquidos por lo que aparecerá un área distendida o hinchada, que fluctúa.

Puede aparecer cierto eritema por compresión dando lugar a dolor, en algunas ocasiones puede drenar parte del contenido por áreas naturales de drenaje. Por ello, ante la aparición de estos síntomas lo recomendado es ponerse en contacto con un profesional médico, que haga una buena exploración con el fin de diagnosticar y tratar de la forma más apropiada las causas de la clínica.

Seroma tardío en las mamoplastias

Los seromas tardíos son poco frecuentes, pero una de las cirugías en las que más aparecen son las mamoplastias. Esto es debido a que, en el caso de las mamoplastias de aumento, dan lugar a mayores fuerzas de cizallamiento.

Estas fuerzas producen microtraumatismos en áreas próximas a la prótesis, ya que esta, está sujeta a las inercias del movimiento. Junto con la actividad del músculo pectoral, ambas favorecen la rotura de adherencias periprotésicas con la consecuente producción de trasudado que se irá acumulando, dando lugar a la aparición de un seroma tardío.

¿Se tiene que hacer algún tratamiento para el seroma?

En la mayoría de la ocasiones los seromas se resuelven de forma espontánea en unas pocas semanas, sólo en el caso de un seroma de gran tamaño o que no se reabsorbe se procederá a su drenaje, con un control de la evolución algo más estrecho y valorando las posibles causa de su no resolución. De todas formas, son los especialistas quienes tomarán la mejor estrategia ante la aparición de un seroma.

El medio interno necesita de estructuras que le faciliten su distribución, es por esto, que ante una cirugía que actúe sobre el tejido celular subcutáneo se facilita la interrupción de los sistemas de drenaje dando lugar al acúmulo de los líquidos intersticiales, además los mecanismos inflamatorios favorecen la extravasación, siendo un factor más que conduce al acúmulo del líquido en el lugar de la cirugía.

Por esto, en la medida de los posible, las cirugías que se emplean intentan ser mínimamente invasivas para que no alteren los sistemas de drenaje. Peor claro está, en ciertas situaciones esto es muy difícil, sobre todo si arrastramos linfáticos y ganglios, donde la aparición de los seromas es más frecuente.

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