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Fórmula leucocitaria: qué es y cómo interpretar sus resultados

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La fórmula leucocitaria expresa la cantidad de los distintos glóbulos blancos que hay en la sangre.

Cuando hablamos de fórmula leucocitaria, hacemos referencia a los niveles de leucocitos o glóbulos blancos que se encuentran en sangre.

Su valoración es importante, sobre todo, a la hora de evaluar infecciones. Aun no siendo específico, nos puede orientar sobre el tipo de infección, el tiempo de esta y otros aspectos de interés.

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¿Qué es la fórmula leucocitaria y que valores analiza?

La fórmula leucocitaria cuenta los diferentes tipos de glóbulos blancos en una muestra de sangre. Existen cinco tipos principales de glóbulos blancos.

¿Cómo leer la fórmula leucocitaria?

En la fórmula leucocitaria encontramos los niveles de los diferentes leucocitos expresados en valores relativos (%) o absolutos (células por mm3), entre ellos encontramos:

Leucocitos: es el número total de células inmunes. Su rango va entre 5.000 y 11.000 células/mm3.

  • Neutrófilos: son los más abundantes y están implicados en todos los procesos inflamatorios, siendo característicos en los cuadros agudos. Sus valores oscilan entre 40-75% en valores relativos y entre los 2000 y 7500 células/mm3.

Cuando el número total de leucocitos, % de neutrófilos y la proteína C reactiva (PCR) son normales de forma simultánea, tienen un valor predictivo del 100% para descartar procesos infecciosos e inflamatorios.

  • Linfocitos (células B, T y natural Killer): los más abundantes después de los neutrófilos. Forman parte de la inmunidad adquirida y se suelen encontrar en cuadros subagudos, crónicos, respuesta inmune específica como infecciones bacterianas o determinadas infecciones virales. Sus valores de referencia se encuentran entre 20-45%, y entre los 1500 y 4000 células/mm3 en valores absolutos.
  • Monocitos: células pertenecientes al sistema innato, que circulan por la sangre hasta alcanzar los tejidos donde se transformarán en macrófagos o células específicas como histiocitos, células de Kupffer… Se encuentran en menor concentración, entre 2-10%, y en valores absolutos entre 200-800 células/mm3.
  • Eosinófilos: células encargadas de las respuestas alérgicas e implicadas en la lucha contra los parásitos, entre otras funciones. Sus concentraciones son del 1-3%, con unos valores absolutos de entre 40-400 células/mm3.
  • Basófilos: más conocidos por su intervención en los cuadros de hipersensibilidad mediada por las IgE, debido a la descarga del contenido de sus gránulos al tejido y torrente circulatorio. Sus valores de referencia son de 0,4-1% y en valores absolutos 10-100.

Esta es la fórmula general, posteriormente se puede profundizar en cada uno de los valores y de las características de los glóbulos blancos.

Fórmula leucocitaria: valores normales

Neutrófilos40-75%
Linfocitos20-45%
Monocitos2-10%
Eosinófilos1-3%
Basófilos0,4-1%

Fórmula leucocitaria alterada ¿por qué ocurre?

La fórmula leucocitaria se ve alterada, sobre todo, en los procesos infecciosos/inflamatorios.

Neutrófilos altos:

  • Procesos agudos como las infecciones agudas.
  • Ataques de gota: debido a la respuesta inflamatoria innata.
  • Enfermedades inflamatorias autoinmunes.
  • Traumatismos.
  • Neoplasias.

Neutrófilos bajos:

En la mayoría de alteraciones de la fórmula leucocitaria los niveles serán elevados. Cuando los niveles sean bajos, neutropenia, podría ser como consecuencia de los mismos procesos, o incluso suponer un indicador de gravedad que ponga en riesgo la vida del paciente, necesitando ser contextualizado correctamente por el especialista.

Linfocitos altos:

Niveles elevados de linfocitos pueden indicar:

  • Enfermedades crónicas de origen bacteriano e infecciones virales como el CMV, VEB, sarampión…
  • Neoplasias de la sangre: como la leucemia, que también podrán alterar los niveles del resto de leucocitos, apareciendo estos muy elevados.

Linfocitos bajos:

Los niveles bajos de linfocitos pueden ser un indicador de gravedad, como ocurre en infecciones como el VIH (LT CD4+), septicemias, leucemias…

Monocitos altos:

Neoplasias de la sangre donde encontramos todos los leucocitos elevados: 

  • Enfermedades del colágeno: AR, lupus, miositis…
  • Infecciones por micobacterias.
  • Mononucleosis infecciosa.

Eosinófilos altos:

  • En enfermedades mediadas por parásitos.
  • En enfermedades de carácter idiopático, en las que aparece eosinofilia.
  • En enfermedades alérgicas.

¿Cuándo solicitar la fórmula leucocitaria?

Siempre que se solicita un hemograma se incluye también la fórmula leucocitaria, para poder hacer un seguimiento del paciente enfermo o en el caso de no estarlo, podemos identificar alteraciones de la inmunidad que requieran de estudios posteriores.

Por lo general, cuando la fórmula leucocitaria está alterada suelen existir síntomas derivados, ya que los leucocitos emplean citocinas, que en muchas ocasiones son mediadoras de la inflamación.

Esto conducirá a la manifestaciones clínicas más comunes:

  • Mal estado general.
  • Fiebre (no tiene por qué darse siempre).
  • Dolor articular o generalizado.
  • Cansancio, astenia y fatiga.
  • Síntomas que acompañan a la patología que está alterando los leucocitos.

Fórmula leucocitaria, contexto e interpretación

Tanto si la muestra de sangre es de rutina como por seguimiento de una enfermedad, las alteraciones de la fórmula leucocitaria deben ser interpretadas y contextualizar con el mayor número de datos disponibles, tanto clínicos como de laboratorio, así como otras pruebas complementarias.

Por ejemplo, ante un proceso infeccioso que se encuentra en fase de resolución, la fórmula leucocitaria puede mantenerse alterada durante un tiempo y esto no significa que no se haya vencido el cuadro infeccioso, sino que precisa de tiempo hasta que se normalizan los parámetros.

Distinto sería si la manifestación de los síntomas persisten o se agravan pero la fórmula leucocitaria se mantiene o incluso puede parecer que ha mejorado. Esto no tiene por qué indicar que existe una mejoría, sino que nos podría orientar hacia una patología que se está agravando y que el sistema inmune se está deprimiendo.

Efectos del agua de mar en los leucocitos

El estudio del empleo del agua de mar según el protocolo de René Quinton para ver los efectos sobre la inmunidad está ofreciendo resultados asombrosos.

Un ejemplo de esos estudios, son los desarrollados con los productos de Quinton Biotech Labs, donde se emplea Quinton isotonic por sus características de especial similitud con el plasma sanguíneo.

Entre los hallazgos experimentales se infiere un efecto protector sobre los hematíes (resultando interesante en las anemias), en comparación con el suero salino utilizado como solución estándar; o bien un aumento de liberación de citocinas por parte de los linfocitos T.

📚 Según el doctor J.M Sempere, director del Departamento de Biotecnología de la Universidad de Alicante, también podemos nombrar la actividad sobre las células Treg. en cultivo, indicando una capacidad de modulación inmunitaria, al poder actuar sobre una de las principales dianas inmunorreguladoras, las células Treg. 

Por otro lado, estos resultados coinciden con los obtenidos en estudios previos, que analizaron el efecto de la Terapia Marina, tanto in vitro como in vivo, sobre la actividad de diversas poblaciones leucocitarias y, en conjunto, sugieren un posible efecto inmunomodulador de la solución Plasma de Quinton.

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BIBLIOGRAFIA:

1. Chernecky CC, Berger BJ. Differential leukocyte count (Diff) – peripheral blood. In: Chernecky CC, Berger BJ, eds. Laboratory Tests and Diagnostic Procedures. 6th ed. St Louis, MO: Elsevier Saunders; 2013:441-450.

2. Vajpayee N, Graham SS, Bem S. Basic examination of blood and bone marrow. In: McPherson RA, Pincus MR, eds. Henry’s Clinical Diagnosis and Management by Laboratory Methods. 24th ed. Philadelphia, PA: Elsevier; 2022:chap 31.

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